Ética Aplicada

Según el estudio realizado sobre la acción humana nos lleva a afirmar que la importancia de la libertad y la autonomía en las acciones y decisiones tomadas por el ser humano y también asimiladas por la vida.
La reflexión se ubica ahora en el valor máximo de la persona, en la única realidad del ser humano: La Vida, y con ella muchas problemáticas.

Estas situaciones nos llevan a reflexionar filosóficamente sobre lo que conocemos como ética aplicada.

El Valor De La Vida
¿Qué hay de malo en matar a una persona?
Toda persona tiene derecho a vivir. El derecho a la vida se traduce al primer imperativo para toda persona: respetar la propia vida y la vida ajena. Así, todo hombre debe poseer y vivir su dignidad y tener que ser respetada en toda circunstancia.
Lo anterior nos permite notar una problemática moral de suma importancia, no se limita al ambiente de la moral sino que traspasa el campo jurídico y medico; surgen algunas preguntas como: ¿Podemos dar limite a la existencia, cortando la vida de manera voluntaria? ¿Cuál es la responsabilidad moral del ser humano con respecto al ciudadano y conservación de los recursos naturales?,etc.
Ante estos interrogantes vale la pena dar algunas respuestas que imponen una valoración integral del ser humano desde el ámbito social y personal.

El Utilitarismo
Este planteamiento identifica lo bueno como algo útil, entendemos como útil lo que proporciona la felicidad al mayor número posible de personas. Fue planteada o formulada inicialmente por:


Jeremy Bentham (1748-1832)
Filósofo, economista y jurista británico, empleo la teoría utilitarista como base, no solo como sistema ético, sino también de reformas políticas y legales. Consiste en la necesidad de sacrificar pequeños intereses a causas más altas o de no sacrificar intereses mayores a otros menores.
John Stuart Mill (1806-1876)
Filósofo y economista británico. Su obra causo gran impacto, en las áreas de ciencias políticas, lógica y ética. Defensor más destacado del utilitarismo después de Bentham.
Se distinguen 2 tipos o posiciones que resultan importantes en la aplicación del utilitarismo:
Utilitarismo Clásico: Busca satisfacer los propios intereses, con la búsqueda del bienestar, etc.
Utilitarismo de Preferencia: Las personas no tiene  como prioridad su propio interés y la satisfacción, ya que tratan de propiciar actos moderados que fomentan el bienestar pero no la totalidad de satisfacción de sus placeres.
Sea cual sea su aplicación, la doctrina utilitarista se encuentra en el ámbito político. Cuando afectamos a diversas personas de distintas maneras, la conclusión es que el utilitarismo es la acción correcta de aquella que maximiza la utilidad agregada de forma impersonal para todas las personas afectadas por esa acción.
Este es el estándar que debemos de utilizar, individualmente y también los responsables políticos cuando toman decisiones afectivas que afectan a la comunidad.
Históricamente, la mayoría de las críticas se ha centrado en el problema de comparar las utilidades que se va a sumar. Recientemente este se centra en el carácter impersonal de la misma suma. En la formula utilitarista, una utilidad es una utilidad, puede ser de cualquier persona.
El Utilitarismo lo que debe hacer, en el ámbito individual como en el colectivo, es independiente de cualquier consideración de quienes somos y de cuales quieran sean los deberes especiales que puedan desprenderse de ese hecho. Un programa utilitarista dice que cada cual en principio es intercambiable por cualquier otro. La impersonalidad no es una actitud moralmente correcta.

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